Parashat Dvarim: La clave de la gueulá

Por Rav Igal Snertz

Es sabido, que el Libro Dvarim – llamado también Mishné Torá − es una repetición de toda la Torá (que dijo Moshé al final de su vida).   

Sin embargo, de un total de más de cien mitzvot mencionadas en el libro Dvarim, más de setenta son mitzvot nuevas, que Hashem dicta por primera vez.

¿Qué tienen en común esas mitzvot, que fueron mencionadas por primera vez en Dvarim? ¿Y qué tienen en común las mitzvot que fueron repetidas?

Las mitzvot del Sefer Dvarim fueron transmitidas, o repetidas, antes de entrar a la Tierra de Israel. Un momento crucial en la historia del pueblo judío, en el cual pasó a ser de un pueblo ambulante en el desierto, una nación establecida en su Tierra.

Este cambio, explica el Rav Hirsch, requiere de instrucciones nuevas, y de la reafirmación de otras, para adaptarse a los desafíos por venir. Desde ahora, ya no estarán aislados en el desierto, deberán ser advertidos de no aprender de las naciones idolatras que los rodean. Desde ahora, tendrán que establecer un orden social con jueces, testigos y otras mitzvot, mencionadas en el Sefer Dvarim.

Pero el cambio más drástico, es el paso de ser un pueblo en el que las necesidades de todos son satisfechas directamente por Hashem, en el que no hay diferencias sociales o económicas, a ser una nación de individuos en el que cada uno debe esforzarse para conseguir su alimento, y donde algunos tienen más éxito y otros, menos. 

Acá es necesario enseñar, o repetir, las mitzvot ben adam lejaveró y gmilut jasadim.

La entrega de la Tierra de Israel al Pueblo de Israel (y, por lo tanto, el mérito de volver de la diáspora), requiere un compromiso de nuestra parte: depende de nosotros.